Relegó sus vacaciones para comprar el vehículo volador

Los vecinos del barrio Krause miran sorprendidos el vuelo del desconocido objeto. Un chico pregunta si es un helicóptero a control remoto y una señora se preocupa por el viento que eleva el artefacto hasta la copa de los árboles.
“No sea cosa que quede enganchado en las ramas”, comentó al pasar, mirando de reojo el tránsito de la avenida De Las Américas, convencida de que era un avioncito.
De a poco los drones van copando la escena, pero todavía son una novedad y no se los conoce demasiado en esta parte de la provincia.
Incluso, días atrás corrió el rumor de que alguien había filmado un ovni en pleno centro de Oberá y subió las imágenes a las redes sociales, donde se propagó rápidamente. Tras un primer alboroto, enseguida aclararon que se trataba de un drone y que no había que temer por una invasión extraterrestre ni mucho menos.
Por el momento, son pocos los pioneros en la materia y recurren a internet para adquirir estos novedosos aparatos con cámaras aéreas que graban y fotografían a varios metros del suelo.
“No es un juguete. Para mí es una herramienta de trabajo. Tenía una plata para irme de vacaciones, pero decidí invertir en el dron para mejorar mi servicio de filmación de eventos”, explicó Daniel Gómez (26), productor de contenidos audiovisuales.
En diálogo con El Territorio, contó que se entusiasmó con las aplicaciones de los drones en septiembre pasado, en ocasión de la Fiesta Nacional del Inmigrante, cuando observó el trabajo de un equipo de profesionales llegados desde Posadas que filmaron el desfile inaugural con una cámara área de alta tecnología.

Equipo básico
Consciente del inmenso abanico de posibilidades que brinda la nueva herramienta, el joven obereño consultó en comercios locales pero no encontró lo que buscaba, por lo que comenzó a indagar en internet y encontró varias opciones.
Finalmente, adquirió un drone cuadricóptero X5C Explorers, cuyo costo ronda entre los 8 y los 10 mil pesos. La transacción se realizó a través de Mercado Libre.
Al respecto, mencionó que “hay modelos y precios para todos los bolsillos; desde 8 mil hasta 50 mil pesos, dependiendo del presupuesto del interesado. Todos los drones rotan 360° grados y tienen una cámara que filma y toma fotos. Ese es el equipo básico, pero con el precio aumentan la tecnología y las aplicaciones”.
Su drone pesa apenas 100 gramos, alcanza una altitud de 50 metros y funciona con una batería de litio que tiene una autonomía de ocho a diez minutos, dependiendo de las funciones que se utilicen.
Las cuatro hélices cuentan con protectores para evitar daños en la caída. Posee dos comandos, uno para volar y otro para dirigir la cámara, lo que requiere buena práctica.
“Todavía estoy practicando y aprendiendo a manejarlo porque lo recibí hace una semana. Como es liviano, hay que tener cuidado con el viento. Pero pienso que es cuestión de práctica. Hice la inversión y considero que me va a redituar porque con el drone mi trabajo suma calidad”, agregó optimista.




Por Daniel Villamea
interior@elterritorio.com.ar


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