Para el juez el móvil del secuestro de Candela es un gran misterio

Miércoles 7 de septiembre de 2011 | 07:19hs.
Allanamientos | La vivienda donde reside Gladys Cabrera, propietaria de la casa donde habría estado cautiva Candela, fue allanada ayer. | Foto: Telam

El juez que lleva adelante las actuaciones de la investigación por el secuestro y posterior asesinato de la niña Candela Rodríguez, Alfredo Meade, indicó hoy, en diálogo con el canal de noticias C5N, que el móvil del secuestro y posterior asesinato de la niña "es un gran misterio" y que sería "imprudente" adelantar alguna causa del hecho. En estos momentos se toma declaración indagatoria a los cinco detenidos

El fiscal de Morón, Marcelo Tavolaro, es quien le toma declaración a Gladys Cabrera, Ramón Altamirano, Gustavo Damián Valenzuela, Alfredo Montero y su hijo Alfredo, todos imputados como partícipes necesarios en el homicidio calificado de Candela Rodríguez. Luego de la declaración que se les tome hoy desde las 8 de la mañana, los investigadores establecerán cuál fue el grado de participación que habrían tenido en el secuestro y asesinato de la niña de 11 años secuestrada el 22 de agosto y asesinada en Hurlingham, según informó el sitio InfoBae.com.

Anoche, la Justicia precisó las imputaciones que pesan sobre las cinco personas que fueron detenidas el lunes por la noche en el marco de la investigación y sospechados de tener algún grado de participación en el secuestro y posterior homicidio de Candela Sol Rodríguez.  Ante un pedido del fiscal Marcelo Tavolaro, el juez de garantías Alfredo Meade imputó anoche formalmente a la dueña de la casa en donde habría estado cautiva la niña, Gladys Cabrera, y al carpintero Ramón Altamirano, Gustavo Damián Valenzuela, Alfredo Montero y su hijo Alfredo de partícipes necesarios en el homicidio. El delito que se les imputa prevé penas muy graves, incluso de prisión perpetua.  Cabe recordar que las detenciones se produjeron en la noche del lunes, luego de que una prueba de ADN confirmara que la nena habría estado en una casa ubicada en Kierman 992 de Villa Tesei.

Esa vivienda está a unos 500 metros de donde arrojaron el cuerpo y a unas 30 cuadras del domicilio de la víctima, y es investigada como el presunto lugar donde Candela estuvo cautiva al menos una parte de los nueve días en que  permaneció desaparecida.  Allí, encontraron un primer bol sobre la mesada de la cocina con restos de arroz seco y otro similar en la heladera con arroz fresco hervido con pollo, por lo que decidieron "levantar" ese alimento con el fin de analizar si existían restos de saliva o células por el posible contacto con la víctima.  Anteayer, esos estudios dieron resultado positivo, lo que derivó en las cinco aprehensiones. 

Es que la autopsia al cuerpo de Candela había revelado que la niña estaba bien alimentada y se encontraron restos de arroz con pollo en su estómago, lo que hizo presumir a los peritos que la comida hallada en la casa de Kiernan fue la que le dieron a la víctima antes de que sea asfixiada. 

También, un grupo de peritos inspeccionó una Renault Trafic blanca del sospechoso Valenzuela que había sido secuestrada antenoche.  Los investigadores presumen que Valenzuela y los Monteros utilizaron esa camioneta para transportar algunos muebles de la casa de la calle Kiernan y también procuraban establecer si pudo haber sido el vehículo para trasladar a Candela hasta el lugar donde finalmente fue arrojada muerta.  Por esa razón es que los peritos buscaron huellas de la niña dentro del vehículo como así también pelos o restos orgánicos en  una lona hallada en la caja del mismo.