Uno menos en suelo parisino
Lunes 25 de mayo de 2015
Máximo González fue eliminado ayer en tres sets de la primera ronda de Roland Garros, al perder con el serbio Dusan Lajovic 6-3, 6-3 y 6-1 en un partido de una hora y 47 minutos que se disputó en la cancha 17 del complejo del Grand Slam parisino, disputado sobre polvo de ladrillo, con más de 21 millones de euros en premios.
Con esta eliminación, ahora son seis los compatriotas presentes en el cuadro principal del torneo y cuatro de ellos (Federico Delbonis y Juan Mónaco, que jugarán entre sí, más Diego Schwartzman y Facundo Argüello) debutarán hoy en el marco de la segunda jornada.
González, primer argentino en salir al ruedo, tuvo una despedida rápida en su cuarta participación en el Major de la capital francesa, pues Lajovic lo venció de manera contundente y enfrentará en la próxima ronda al suizo Stanislas Wawrinka, octavo favorito, y vencedor del turco Marsel Ilhan por 6-3, 6-2 y 6-3 en su debut.
En el primer día de competencia, lo destacado fue el triunfo de Roger Federer (2), campeón en 2009, sobre el colombiano Alejandro Falla por 6-3, 6-3 y 6-4. Su próximo rival será el Marcel Granollers, que dio cuenta del alemán Matthias Bachinger 6-4, 6-3 y 7-6 (7).
Más argentinos a la cancha
La actividad argentina en Roland Garros continuará hoy en tres partidos. El primero de ellos, previsto a las 6 en la cancha 11, enfrentará al tandilense Pico Mónaco (34) y al azuleño Delbonis (74), cuyo vencedor será rival del ruso Teimuraz Gabashvili (76) o el español Feliciano López (12).
En el tercer turno de esa misma cancha, no antes de las 11, el Peque Schwartzman se medirá con el austriaco Andreas Haider Maurer (48).
Finalmente, el estadio principal del complejo, el Philippe Chatrier, Argüello tendrá una difícil misión ante Murray -tercer preclasificado-, luego de ingresar al cuadro principal como perdedor afortunado, pues pese a perder en la clasificación previa, se benefició con un retiro.
Superada la jornada de mañana, sólo quedarán dos argentinos a la espera de su primera presentación: el correntino Leonardo Mayer (24), que debutará ante un rival complicado como el checo Jiri Vesely (37) y el chascomunense Carlos Berlocq (101), cuyo rival será el ucraniano Illya Marchenko (128), surgido de la clasificación.
Con esta eliminación, ahora son seis los compatriotas presentes en el cuadro principal del torneo y cuatro de ellos (Federico Delbonis y Juan Mónaco, que jugarán entre sí, más Diego Schwartzman y Facundo Argüello) debutarán hoy en el marco de la segunda jornada.
González, primer argentino en salir al ruedo, tuvo una despedida rápida en su cuarta participación en el Major de la capital francesa, pues Lajovic lo venció de manera contundente y enfrentará en la próxima ronda al suizo Stanislas Wawrinka, octavo favorito, y vencedor del turco Marsel Ilhan por 6-3, 6-2 y 6-3 en su debut.
Más argentinos a la cancha
La actividad argentina en Roland Garros continuará hoy en tres partidos. El primero de ellos, previsto a las 6 en la cancha 11, enfrentará al tandilense Pico Mónaco (34) y al azuleño Delbonis (74), cuyo vencedor será rival del ruso Teimuraz Gabashvili (76) o el español Feliciano López (12).
En el tercer turno de esa misma cancha, no antes de las 11, el Peque Schwartzman se medirá con el austriaco Andreas Haider Maurer (48).
Finalmente, el estadio principal del complejo, el Philippe Chatrier, Argüello tendrá una difícil misión ante Murray -tercer preclasificado-, luego de ingresar al cuadro principal como perdedor afortunado, pues pese a perder en la clasificación previa, se benefició con un retiro.
Superada la jornada de mañana, sólo quedarán dos argentinos a la espera de su primera presentación: el correntino Leonardo Mayer (24), que debutará ante un rival complicado como el checo Jiri Vesely (37) y el chascomunense Carlos Berlocq (101), cuyo rival será el ucraniano Illya Marchenko (128), surgido de la clasificación.
Un momento incómodo para Federer 
Un joven aficionado saltó ayer a la pista central de Roland Garros para intentar sacarse un selfie con Roger Federer, justo después de que el suizo batiera al colombiano Alejandro Falla, por 6-3, 6-3 y 6-4, en la primera ronda.
Con cara de sorpresa, Federer miró a los guardias de seguridad, que tardaron tiempo en reaccionar y atrapar al fan. “No sabía quién era y nadie reaccionó hasta que me di cuenta que era un chico del público”, señaló Federer en la rueda de prensa posterior al duelo con Falla, que terminó 6-3, 6-3 y 6-4 a favor del número 2 del mundo. “No estoy feliz por lo ocurrido. Pasó el sábado también en el entrenamiento. Fue sólo un niño, pero después entraron tres más”, añadió el suizo. “Y ahora, en la pista central, un lugar que se supone al que nadie puede saltar, empezó a andar y nadie hizo nada”, dijo el suizo, molesto con la seguridad de la cancha Philippe Chatrier.
El suizo incluso apeló al recuerdo. “Ya me ocurrió en la final de 2009. Creo que se debe actuar rápido en estas situaciones”, explicó Federer, que en aquel partido vio cómo un hombre le colgaba del cuello una bandera del Barcelona. “Normalmente sólo hablo en mi nombre, pero en esta situación creo que hablo en nombre de todos los jugadores. Es el lugar donde trabajas, es un lugar en el que te quieres sentir seguro”.
Un joven aficionado saltó ayer a la pista central de Roland Garros para intentar sacarse un selfie con Roger Federer, justo después de que el suizo batiera al colombiano Alejandro Falla, por 6-3, 6-3 y 6-4, en la primera ronda.Con cara de sorpresa, Federer miró a los guardias de seguridad, que tardaron tiempo en reaccionar y atrapar al fan. “No sabía quién era y nadie reaccionó hasta que me di cuenta que era un chico del público”, señaló Federer en la rueda de prensa posterior al duelo con Falla, que terminó 6-3, 6-3 y 6-4 a favor del número 2 del mundo. “No estoy feliz por lo ocurrido. Pasó el sábado también en el entrenamiento. Fue sólo un niño, pero después entraron tres más”, añadió el suizo. “Y ahora, en la pista central, un lugar que se supone al que nadie puede saltar, empezó a andar y nadie hizo nada”, dijo el suizo, molesto con la seguridad de la cancha Philippe Chatrier.
El suizo incluso apeló al recuerdo. “Ya me ocurrió en la final de 2009. Creo que se debe actuar rápido en estas situaciones”, explicó Federer, que en aquel partido vio cómo un hombre le colgaba del cuello una bandera del Barcelona. “Normalmente sólo hablo en mi nombre, pero en esta situación creo que hablo en nombre de todos los jugadores. Es el lugar donde trabajas, es un lugar en el que te quieres sentir seguro”.
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